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CURIOSIDADES ENTREVISTAS

De Oberá a Milano: una misionera con raíces italianas

misionera - Valentina Con Remera Argentina

Con el pasar de los años, y especialmente en estos últimos tiempos, es cada vez más frecuente ver casos de jóvenes abriendo sus caminos y adquiriendo experiencias por el mundo.
Muchas veces comienza siendo una especie de vivencia itinerante y temporal, pero otras veces termina transformándose en una nueva forma de vida, una forma definitiva y absoluta.
Enriquecedora por donde se la mire. Es tomar la valija, cargarla de sueños y salir a perseguirlos. Esta es quizás una de las decisiones más difíciles de tomar para algunos. Expuestos estos puntos, les compartimos la vivencia de Valentina Ferrari, una misionera viviendo en Italia.

Experiencias de viaje

Valentina Ferrari D’Agostini, tiene 21 años y es oriunda de la ciudad de Oberá, zona centro de la provincia de Misiones y capital nacional de los Inmigrantes
“Hace ocho años que trabajo en el mercado de la moda como modelo, de pequeña viajaba a Buenos Aires para hacer ciertos trabajo”, comenta Valentina.

misionera - Valen Caminando
Valentina caminando por las calles de Milano

“Terminé el secundario en mi ciudad y me mudé a estudiar la carrera universitaria de Comunicación en Buenos Aires”. La misionera acota que a los 18 años de edad tuvo su primera oportunidad de trabajar en el exterior.
Esto significó la búsqueda de nuevos horizontes y mercados, y fue así que comenzó a vivir entre dos capitales internacionales, Paris y Londres.
Valentina afirma que “una vez finalizadas las temporadas de trabajo, no quería quedarme con el pensamiento de volver a Argentina”.
“Sentía que había adquirido mucha experiencia y volver sería como desperdiciar toda esa experiencia laboral”, dice nuestra entrevistada.
Fue así que la misionera decidió apostar a seguir sus sueños y se dirigió hacia la capital internacional de la moda en Italia, la ciudad de Milán.

Tiempos de cambio para esta misionera

“Venía solo por dos meses, tenía incluso el pasaje de vuelta a Argentina” afirma la misionera.
En destino conoció a su actual pareja, y fue allí donde decidió utilizar todas las herramientas posibles para poder mantenerse en ese rumbo. De este modo consiguió una visa de trabajo la que le permite vivir, trabajar y tramitar la ciudadanía italiana actualmente.
“Soy ascendiente italiana por ambos padres, también tengo ascendencia sueca pero ese es otro tema y por el momento inaccesible.”

misionera - Fuente En Milano
Fuente de Sforza

La misionera Valentina sueña con poder tramitar la ciudadanía italiana jure sanguinis, por sangre.
Afirma que “sería cumplir un ciclo“. Nos cuenta que para ella representa tanto reconocer algo por lo que sus bisnonni atravesaron.
“Muy pocos entienden lo difícil que es estar lejos de la familia, de las costumbres, de nuestra lengua y de las raíces de donde crecimos”, comenta Valentina.
“A mi me costo mucho este cambio… no me quiero imaginar lo difícil que fue adaptarse para todos aquellos inmigrantes en su momento.

La misionera cuenta cómo es vivir lejos de su tierra

Para Valentina, vivir en Europa representa una puerta abierta a oportunidades laborales, de estudio y crecimiento personal. ” Italia para mí lo es todo esto, me abrió las puertas y yo estoy muy agradecida.”
También comenta que por más que tengamos culturas, idiomas y hasta costumbre bastante similares entre Argentina e Italia, jamás será lo mismo como el país de uno. Con el pasar del tiempo uno se va dando cuenta, va notando determinadas ausencias.

misionera - Atractivo En Milano
Arco della Pace

“Al norte, donde vivo, las personas son más frías, no hacen reuniones los domingos para un almuerzo en familia, no existe la juntada para el mate o para comer reviro” aclara la misionera.
Extraño estos momentos y las cosas caseras de la abuela“, y continúa, dice que en lo posible quiere continuar estas costumbres con sus amigos argentinos en Milán.

Argentinos en Italia

La misionera aclara que desde su llegada a Italia, pudo percibir una fuerte hermandad entre todos los argentinos que viven allí. “Nos ayudamos entre todos, más que nada en estos tiempos de dificultad… nunca nos vi tan unidos, nunca nos vi tan fuertes”.
Muchas veces este tipo de relación en el mismo suelo nacional tiende a ser poco frecuente, principalmente por diferencias u opiniones.
Pero la realidad es que estando afuera y lejos del lugar de pertenencia, tienden a dejarse de lado las diferencias y comenzar a jugar un rol más bien solidario.

misionera - Amanecer En El Duomo
La famosa postal de Milano

Valentina finaliza con un deseo: “fuerza y coraje a todos los que quieran buscar nuevas oportunidades
Es una cuestión de perder un poco el miedo a lo desconocido y animarse a más. Una experiencia muy positiva, que lógicamente como todo, tendrá momentos difíciles, pero también momentos únicos.
“Nunca dejen de lado algo que quieran, búsquenlo hasta haberlo encontrado. Para nadie es fácil, pero nada es bueno si no cuesta obtenerlo“, así finaliza nuestra entrevistada, Valentina Ferrari D’Agostini.

De Oberá a Milano: una misionera con raíces italianas ultima modifica: 2020-09-28T20:16:40-03:00 da Fernando Alessio

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