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Tartini y Paganini, los violinistas del diablo

Tartini y Paganini

A lo largo de la historia, son múltiples los relatos de tradición oral cuyo tema aborda la venta del alma al diablo. Generalmente, a cambio de fama, riqueza o dones prodigiosos. Los músicos para mejorar su talento no se escaparon de tal acusación. Tal vez los casos más famosos sean los de los violinistas italianos Tartini y Paganini. En itMisiones te contamos su historia y repasamos sus composiciones más famosas.

Giuseppe Tartini, el genio del violín

Giuseppe Tartini, nacido en Pirano, Istria, en 1692, fue un virtuoso del violín y director de orquesta en la iglesia de San Antonio de Padua. Tartini fundó su propia escuela de violín en Padua y trasladó su talento a Praga durante tres años. Descubrió el fenómeno acústico de la combinación tonal, desarrolló una técnica de manejo del arco y mejoró las cuerdas. Su obra más conocida, “Il trillo del diavolo”, representa al diablo tocando el violín. Falleció en 1770 en Padua, dejando un legado inigualable en la música y los tratados teóricos. Su maestría solo fue superada años después por otro violinista, Niccolò Paganini.

La noche que Tartini soñó con el diablo

Según cuenta la historia, una noche de 1713, Giuseppe Tartini tuvo un sueño tan terrorífico que aún lo recordaba con claridad años después. En su sueño, hizo un pacto con el Diablo y le prometió su lealtad. Para su sorpresa, el Diablo se convirtió en su sirviente y le concedió todos sus deseos. Emocionado por tener un aliado tan poderoso, Tartini le dio su violín y desafió al diablo a tocar una pieza romántica. El músico no podía creer lo que escuchaba. El diablo tocó con una habilidad y una pasión inhumana, creando una sonata tan singular y hermosa que nunca antes había oído algo parecido. El compositor estaba completamente asombrado y extasiado por la música.

Pero el sueño se convirtió en una pesadilla cuando Tartini se despertó abruptamente, bañado en sudor. A pesar de sus esfuerzos por recordar la sonata, el violinista no pudo capturar su magia en su propio violín. La música que creó después, que él llamó “La sonata del diablo”, no se comparaba con lo que había escuchado en su sueño. El musico estaba tan frustrado que quiso romper su violín en pedazos y abandonar la música para siempre. Desde entonces, la gente cuenta esta historia como un recordatorio de que hacer un trato con el Diablo puede tener consecuencias mortales.

Paganini, el violinista sin sepultura

Niccolò Paganini nació en Génova en 1782 y mostró habilidades musicales desde joven. A los trece años inició una gira por varias ciudades de Lombardía, impresionando con su destreza en la guitarra. En 1801 compuso más de veinte obras, ganando reconocimiento en Italia y Europa. Fue director musical en la corte de Maria Anna Elisa Bacciocchi entre 1805 y 1813 y realizó giras por Europa. Sus obras incluyen veinticuatro caprichos para violín solo y seis conciertos. Falleció en Niza en 1840 y fue enterrado por la duquesa de Parma en 1845 después de que la Iglesia le negara sepultura en el camposanto.

El encanto secreto detrás de Paganini

Las malas lenguas cuentan que, para obtener su gran maestría en la música, Paganini hizo un pacto con el mismo demonio cuando era pequeño y que en su violín encerraba el espíritu de damas de voz agraciada. Otros relatos cuentan que fue su propia madre quien lo hizo. La vida licenciosa del músico, su afán por vestir de negro, su capacidad de conquistar a las mujeres con su música a pesar de su aspecto poco afable, otorgaron más leña al fuego de la leyenda. Además, el hecho de que la Iglesia negara durante años el permiso para enterrar su cuerpo en el camposanto tampoco ayudó, pero esto se debió más a la supuesta relación de Paganini con la masonería que a sospechosos tratos con seres sobrenaturales.

Avance de la película “El violinista del diablo“, basada en la vida de Paganini.

Tartini y Paganini, el legado más allá del mito

Más allá de las leyendas oscuras, los supuestos pactos con el diablo de Tartini y Paganini solo fueron una forma de explicar su talento inusual para la música. Su legado aún pervive y sigue resonando e inspirando a diversos músicos académicos, adeptos del heavy metal e incluso de la música electrónica. Al fin y al cabo, los tratos sobrenaturales que condimentan las biografías de Tartini y Paganini es lo de menos.

Tartini y Paganini, los violinistas del diablo ultima modifica: 2023-03-16T10:04:00-03:00 da Leo Motta

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